Clasificar los integrantes de un grupo de acuerdo a dos variables dicotómicas genera cuatro posibles segmentos. A cambio de tener poco detalle, es una clasificación que puede representarse de forma muy gráfica e intuitiva en un diagrama de dos ejes, como el clásico de distinción de clientes de acuerdo a sus niveles de fidelización y satisfacción: apóstoles, rehenes, mercenarios y terroristas.